Gurutze, fue la única que nació en Orexa en 1995.
En cuanto llegamos, nos explicó el mapa demográfico del pueblo. Hoy en día Orexa tiene 33 habitantes de menos de 25 años, por tanto, a pesar de ser un pueblo joven, el futuro de un pueblo tan pequeño siempre es incierto, y es que los jóvenes tienen tendencia a irse; primero por los amigos y los estudios, y más tarde por las oportunidades de trabajo o las particularidades de la vida en el pueblo.
Gurutze, desde su papel como segundo alcalde, tiene muy claro que desde el pueblo hay que ofrecer “algo más” para mantenerlo vivo y conseguir que la gente joven decida quedarse a vivir.
En general, parece que cuesta mucho que la gente joven se implique, sobre todo en proyectos relacionados con la supervivencia y desarrollo del pueblo. Gurutze es una excepción. Es una muestra de una joven nacida en un pueblo pequeño, que está dispuesta a asumir responsabilidades y compromiso con el futuro de su comunidad.